domingo, junio 17, 2007

hipótesis

que el alimento para gatos se llame whiska, ¿vendrá de whiskería?

jueves, junio 07, 2007

mudándose

Algunas ideas mientras embalo

1. Como dijo A, definitivamente los diarios sábanas son más apropiados.
La cara de Facundo Arana enrollada en el gancho para colgar plantas es definitivamente eso: apropiada.

2. La naturaleza de una persona puede deducirse de a) materiales que embala, b) materiales con los que embala.
a) Nosotros somos un montón papeles
b) No es lo mismo quien envuelve sus platos con las páginas de los clasificados y sección deportes, a quien los guarda provisoriamente entre las páginas llenas de títulos de colores y dibujos de, por ejemplo, el radar.
También hay una diferencia sustantiva entre quien colecciona cajas con insistencia un mes antes de mudarse y empieza a mirar con cariño cualquier deshecho que tenga potencial de embalaje, y quien alquila canastos que en un día se llenan, en otro se vacían, y al otro se devuelven para que empiecen de nuevo su ciclo mudador en otra parte.
Las cajas son una convivencia larga. Primero apiladas como tótem en el living hasta que “invierten el movimiento” (verso de A) y se llenan. Después se cargan, se descargan, se vacían de a poco, y quedan flotando en la nueva vida, mojón de eso que acaba de pasar a otro tiempo verbal.

3. Descubro finalmente la utilidad del Radar (con lo que se aclara mi posición en el punto 2b). No sólo del Radar, Le Monde Diplomatique y la Haciendo cine tienen un papel suave que sirve para hacer bollos de relleno en esas cajas que van a llevar el rótulo de frágil. Sin aliento (periódico BAFICI) en cambio, ni por su tamaño -tabloide- ni por su papel – áspero y de gramaje superior al del diario- califica. Ese sería, a mi modo de ver de hoy, un ejemplo de periodismo inútil.

4. Si somos tan pobres, ¿por qué esta montaña de cosas insiste en ser nuestra?

5. Me mudo porque necesito una excusa para descartar objetos que no tienen otro sentido que la nostalgia, y su contraparte la acumulación. Me mudo para poder tirar esa bolsa llena de boletos de colectivos, subtes y trenes, una postal engrasada de dos años en la cocina, la tira de papel que se rompió y sigue pegada a la pared, el trapo fiel que limpió tantas veces la mesada después de cada comida y que ya merece jubilarse.

viernes, junio 01, 2007

sudek uno más