miércoles, julio 30, 2008

Mi hijo down


Mi niño.

Ahora mi niño no quiere la noche para dormir,
la quiere para frotársela, para hacerse un vestidito de estrellas
y ser la vía láctea derramándose por una calle infinita, por un
pasaje oscuro en donde se arrincona el amor. Mi niño corazón
insomne parpadeando como una polilla herida, corriendo
antes que la madrugada, sacando chispas, mojándose los
labios internos con el alcohol que se esparce en la mesa como
palomitas de maíz, como palomitas recién aventadas contra
los parabrisas. Mi niño dice que ya no va a dormir que se me
va por la calle infinita y que irá dejando su nombre en las
paredes, en los micros, en los vidrios del metro, en el cemento
fresco, para que así yo no olvide de nombrarlo, para que yo lo
busque entre las ruinas de esta maternidad devastada.

Pablo Paredes Mi hijo down 2008
Ed. Black & Vermelho



2 comentarios:

Anónimo dijo...

hacía mucho que no pasaba por acá, qué buenas las cosas que está aspirando esta máquina.
besos!!!

PORTÁTIL dijo...

qué querés decir con aspirando, dónde me viste?